Los lirones

Son especialmente sensibles al clima y a otros factores del ambiente que los convierte en importantes bioindicadores

El lirón gris es el más grande de todos los glíridos y, aunque de manera puntual puede depredar insectos y pequeños artrópodos, es un animal vegetariano que presenta una singular dependencia por los frutos secos (bellotas, hayucos, avellanas, etc.). Su presencia se suele asociar a bosques maduros y bien conservados.



¿Quiénes son los lirones?

Los roedores forman el orden mes diverso dentro de los mamíferos, con unas 2.280 especies que habitan en numerosos y diversos hábitats de todo el mundo. Dentro de este gran orden encontramos la familia de los lirones (Gliridae), una de las familias vivas más antiguas dentro de los roedores.

Los lirones son un grupo diferente, interesante y distintivo en muchos aspectos. Como pequeños mamíferos que son, los lirones responden rápidamente a los cambios que afectan al medio, siendo muchas de sus especies hibernantes estrictas. Esto les hace especialmente sensibles al clima y a otros factores del ambiente que los convierte en importantes bioindicadores de los cambios ambientales, provocando que sean dignos de considerables investigaciones.


¿Qué especies encontramos en nuestro país?

Los lirones, pese habían sido ampliamente distribuidos por la zona Paleártica, actualmente su distribución se encuentra limitada. Este grupo está formado por 9 géneros y unas 26 especies vivas, de las cuales la mitad se encuentran en África y el resto distribuidas entre Europa y Japón. Sin embargo, recientemente, la pérdida de hábitat agravada por el impacto del hombre ha provocado que numerosas de estas especies se encuentren amenazadas y sean consideradas raras o en peligro de extinción.

En España encontramos representados dos géneros, el Glis y el Eliomys. El Glis glis, es la única especie de este género y se encuentra por todo el tercio norte peninsular (desde Cataluña a Galicia). El género Eliomys presenta dos especies y 4 subespecies en España. La especie Eliomys melanurus que se encuentra en las ciudades norteafricanas de Ceuta y Melilla y la especie Eliomys quercinus más ampliamente distribuida por España con 4 subespecies:

  • E. q. quercinus: ocupa casi toda el área peninsular y es la que se encuentra en Cataluña.
  • E. q. lusitanicus: se distribuye por el sur oeste penisnular.
  • E. q. gymnesicus: presente en Mallorca y Menorca.
  • E. q. ophiusae: sólo se encuentra en Formentera.

No se encuentra ningún representante de este género en las islas Canarias ni en Ibiza.

Dentro de la fauna vertebrada autóctona de Cataluña, sólo encontramos representadas dos especies de glírids, el lirón gris (Glis glis) y el lirón careto (Eliomys quercinus).


Lirón gris (Glis glis)

El lirón gris es un roedor que se distribuye prácticamente por toda Europa siguiendo el bosque caducifolio. En la Península Ibérica se encuentra restringido en la franja norte eurosiberiana entre los 50 y 2000 metros de altitud y un rango de precipitación entre los 525 y 1850 mm anuales.

En Cataluña, el lirón gris se distribuye por el Pirineo, Prepirineo y la región oriental húmeda, en los dominios de los bosques caducifolios típicos como hayedos, robledales húmedos y avellaneros.

Por el norte, las poblaciones de lirón gris llegan hasta el macizo de la Albera, el sector más oriental de los Pirineos y donde se encuentran los últimos hayedos antes de llegar al Mediterráneo.

Por el sur, la especie llega a la cordillera Prelitoral y Litoral, donde se encuentran las poblaciones de lirón gris más meridional de toda la Península Ibérica, concretamente en el macizo del Montnegre.

Lirón careto (Eliomys quercinus)

El lirón careto tiene una distribución más amplia por todo el territorio catalán y se encuentra en diferentes tipos de ambientes como bosques, matorrales, canchales e incluso puede aprovechar muros de piedra seca en zonas de cultivo de secano. Suele refugiarse en agujeros entre las rocas y es menos arborícola que el lirón gris.

A diferencia del lirón gris, el lirón careto tiene una dieta omnívora, compuesta tanto por frutos y semillas como por pequeños vertebrados e insectos.

Recientemente las poblaciones mediterráneas de esta especie parecen haber sufrido un descenso importante del qual se desconocen las causas exactas pero que se asocia a los cambios en los usos del suelo, como la forestación y la pérdida de espacios abiertos.


El lirón gris (Glis glis)

El lirón gris es el más grande de todos los glíridos y, puntualmente puede depredar insectos y pequeños artrópodos, es un animal vegetariano que presenta una singular dependencia por los frutos secos (bellotas, hayucos, avellanas, etc.). Su presencia se suele asociar con bosques maduros y bien conservados de haya y roble, los cuales presentan una mayor oferta de cavidades naturales respecto a bosques jóvenes. Estas cavidades son clave para el desarrollo de su ciclo vital, sobre todo por el desarrollo de la cría durante su periodo activo. Además de ser un hibernante estricto, es un fuerte especialista de un tipo de hábitat y alimento, lo que lo hace aún más sensible a los cambios que afectan a su entorno.

La fuerte especialización del lirón por el bosque caducifolio se manifiesta con una gran sincronía entre él y el medio, sincronizando su reproducción con el momento de mayor disponibilidad de frutos secos y adaptando su fenología al calendario del hábitat en el que vive. Su seguimiento nos permite ver las fluctuaciones que presentan sus poblaciones entre años y también dentro de un mismo año en diferentes regiones en función de la disponibilidad de comida. Poder registrar estas variaciones a lo largo del tiempo y de manera continua es básico para entender los factores de cambio y las respuestas a estos.


El lirón gris y el cambio climático

Es bien conocido que las condiciones climáticas influyen en la demografía de las poblaciones, afectando directamente a su mortalidad o indirectamente alterando sus ciclos vitales y su reproducción. En un contexto de cambio global, las especies especialistas a diferencia de las generalistas sufrirán con mayor intensidad las variaciones del hábitat provocadas tanto por causas antrópicas como climáticas.

De acuerdo con ello, el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM), dio a conocer el año 2011 los resultados de un estudio donde se ponía de manifiesto los efectos del cambio climático sobre la distribución potencial futura de los vertebrados, según diferentes escenarios de cambio climático establecidos por el IPCC (Intergovernmental Panel on Climate Change). Según este estudio, el lirón gris se encuentra entre las 5 especies de requerimientos centroeuropeos con mayor riesgo de pérdida de hábitat potencial, en Cataluña y España (26% y 38% de pérdida estimada en este siglo, respectivamente).


Con este escenario, el seguimiento de la biodiversidad a largo plazo es clave para conocer y entender cómo estos cambios están afectando y afectarán a las especies y las comunidades en un futuro, con especial atención al seguimiento y estudio de las poblaciones resilientes al límite de su distribución biogeográfica. Estas poblaciones son las primeras en recibir el efecto de estos cambios y las primeras en responder, como por ejemplo las poblaciones de lirón gris más meridionales de la península ibérica que se encuentran en el macizo del Montnegre.

Els petits mamífers i el canvi climàtic a la Xarxa de Parcs Naturals de la Diputació de Barcelona (Sólo disponible en catalán)

Reportatge sobre els lirons al 324 (Sólo disponible en catalán)


Otras especies de interés que pueden ocupar las cajas nido

Aparte de los lirones, las cajas nido pueden ser ocupadas por otras especies como pájaros, otros pequeños mamíferos y algunos invertebrados. Recoger estos datos durante la inspección de las cajas es sencillo y aportarán un valor extra muy importante de información y conocimiento que complementará el seguimiento.